NIÑOS ABANDONADOS POR SUS PROPIOS PADRES: UNA CRUDA Y ESPANTOSA REALIDAD

Mientras algunos están deseando que las pruebas de embarazo salgan positivas, otros dejan tirados a sus hijos en un basurero o en un parque. Varios padres se encargan de “deshacerse” de sus hijos sin sentimiento, razón o humanidad alguna. Como si estuviéramos hablando de un simple saco o una ropa vieja de la cual nos queremos deshacer.

Primero que nada no entiendo cómo alguien puede hacer eso con un recién nacido, con un niño que no tiene la culpa de que sus padres sean unos irresponsables al no controlar sus impulsos sexuales, y después estén llorando porque no tienen plata ni para mantenerse a sí mismos.

Si usted no quiere tener un hijo, no es lo suficientemente maduro para encargarse de uno o no tiene los suficientes pantalones para enfrentar las consecuencias que conlleva tener sexo sin protección, entonces evítese molestias y cuídese, piense las cosas antes de hacerlas y ande un par de “Durex” en su billetera.

Pero si ya “metió las patas”, entonces hágase responsable y en vez de dejarlo tirado en la primera esquina que vio, tenga más tacto y consideración por esa criatura que no tiene nada que ver con su poca humanidad.

Hace algunos días, salió la noticia de que dos recién nacidos fueron abandonados con tan solo una caja de cartón y una cobija. Esto es el vivo ejemplo de que en nuestro país, cada vez hay más personas que deciden escabullirse de la realidad y dejarles a otros la responsabilidad que a ellos les concierne.

Y dejarlos tirados no es tan malo como los cientos, o mejor dicho, los miles de casos de agresión contra niños que se presentan. Golpes, quemaduras, moretes y violaciones, son parte de las atrocidades que desconocidos y hasta los mismos familiares, les hacen a los menores de edad.

Se supone, dentro del concepto de normalidad, que los padres están para cuidar de sus hijos, para amarlos y encaminarlos durante sus vidas, no para golpearlos, torturarlos o violarlos hasta el cansancio ¡Por Dios! ¿Qué le pasa a la gente?

El abandono no solamente es cuando tiras a un niño a la calle, también se da cuando no se le cuida y permitimos que otras personas lo hagan, sin conocer la verdadera y cruda realidad de que pueden estar abusando o agrediéndolo constantemente.

Reitero, ¿Qué le pasa a la gente? ¿Cómo pueden dejar a sus hijos en un simple rincón para que alguien más los acoja? ¿Cómo puede violar a una niña que ni tan siquiera ha desarrollado completamente sus partes íntimas? Estas preguntas pueden sonar muy fuertes, pero es lo que sucede en nuestra sociedad, en nuestras casas y hogares.

El ser humano está perdiendo su sensibilidad y su propio egoísmo no le permite ver claramente las muy malas acciones que está efectuando.

Esos que dejan a sus hijos tirados como si fueran una basura, a esas que no les importa quedar “panzonas” y después simplemente dejar al bebé tirado en la banca de un parque, a aquellos que no les duele ni se apenan por maltratar a un menor, esos, son los nuevos inhumanos que para mí, aparte de no tener una pizca de sensibilización, son una plaga que lo único que generan es malestar y problemas.

Para mi todas esas personas podrían vivir por el resto de sus vidas en una cárcel, y los que no se hacen cargo de sus hijos, la misma vida se encargará de hacerles pagar por lo que hicieron.

Con tantos métodos anticonceptivos en la actualidad, miles de adolescentes continúan embarazándose y después no saben qué hacer como progenitores. Nos falta educación, conciencia y que las familias estén más atentas a lo que sucede dentro del núcleo familiar.

No queremos más violencia, no queremos más niños golpeados ni más bebés abandonados. Queremos ver más niños riendo, estudiando, jugando y siendo felices. Eso es lo que ellos se merecen: vivir.