NI MUY FÁCIL NI MUY SANTURRONA, YO SIMPLEMENTE DISFRUTO DE MI SEXUALIDAD

Los prejuicios y señalamientos son muy frecuentes cuando de sexualidad se trata. Muchos manejan una doble moral en donde todo lo sexual es “malo”, pero sí lo disfrutan y lo hacen muy a menudo. ¡Por favor, no seamos hipócritas! El sexo, sí, esa palabra que ya no es un tabú, es lo más normal del mundo y TODOS lo practicamos (el que no, pronto lo hará).

Desde nuestros padres y abuelos; el mundo está lleno de millones de personas gracias al contacto sexual entre dos seres humanos. Ahora bien, en pleno siglo XXI, vemos como muchos (en su mayoría mujeres) son catalogadas como fáciles por disfrutar de su sexualidad. Lo único que puedo decir ante esto, es que mientras usted se cuide y no lastime a ninguna persona, puede hacer lo que le plazca.

Tener una vida sexual activa no es malo, sentirse viva, mujer y amada tampoco lo es. Tener sexo no debería ser visto como algo maléfico y muchos menos se debe clasificar como “zorra” a una mujer que sabe lo que quiere y que no tiene miedo a vivir plenamente.

Por supuesto que los extremos son malos, tampoco es que va a andar de chico en chico o se va a negar a tener sexo, es su vida, sus decisiones y si se siente bien con lo que hace, entonces no se detenga.

Yo soy de las que disfrutan de su sexualidad, de las que no son fáciles ni santurronas, simplemente soy una mujer que no se cohíbe en temas de sexo y que no le da miedo decir: “sí, yo también lo hago, al igual que todos en esta habitación”.

Dejemos esa doble moral en la que muchos hablan, juzgan, critican y señalan, pero en realidad están haciendo lo mismo sólo que “a lo callado”.

En este mundo no hay ningún santo ni mucho menos, todos somos humanos y cada quien toma el camino que quiere recorrer. Si disfruta de su sexualidad, sígalo haciendo que después de todo es su cuerpo. Eso sí, nunca olvide amar a la persona más importante en su vida: usted mismo.